Este es un viaje que todo aquel que sienta cariño por Venezuela DEBE hacer...
Llegar a Carora en carro desde Caracas es un viaje de unas cuantas horas, pero en un autobús repleto de cocineros, música y algo "de tomar" pues es un viaje bastante divertido... y bien vale la pena.
Viajar a Altagracia, a unos 25 kilómetros de Carora, donde se encuentran los viñedos de Pomar es un trayecto que te hace pensar... "en medio de este peladero de chivos, cómo lograron instalarse???"
Nos recibieron con un desayuno muy rico y sencillo, donde disfrutamos de unas arepitas rellenas de queso de cabra fresco y un queso de vaca llamado "toncha", que en Carora le dicen a las cosas deformes... pues el queso, es así, sin forma; también unas cachapitas maravillosas y unas galletas que elabora una señora llamada Eloina... Doña Eloina tiene 86 años y hoy en día sus hijas y nietas continúan con una tradición que ha hecho que Doña Eloina sea conocida en todo el Estado.
Recorrer los viñedos, recibir la explicación detallada de todo el proceso de siembra, cuidado, recolección, transporte, etc. es maravilloso... núnca imaginé lo dulce que podían ser las uvas para vino... He leído bastante sobre eso, he visto fotografías, he asistido a charlas, pero NADA se compara con "verlo en persona".
La mañana transcurrió entre viñedos, paisajes hermosos, calor abrazador y un orgullo que no cabe en el pecho, al ver las cosas que se están haciendo en nuestro país.
Sin duda Empresas Polar cuando hace algo, lo hace BIEN.
En otro post comento algunos detalles de las preguntas que surgieron durante el viaje... que fueron miles !